Historias del VasoOoO...!!! (1)

EL VIERNES FATÍDICO DE... EMILIO PATATO

Pongamonos en situación... Trátase de un viernes del mes de Julio del año 2006. Dicho viernes, y rara vez en nuestra peña, salimos juntos todos los del Vasooo. Esa noche, Emilio salió a darlo todo. Normalmente es pedir un vaso y tener que meterle prisa pa' que se lo beba y pedir otra ronda. Ese día no!! Ese día... era el día de Emilio.

Eran las 3 de la noche, y Emilians ya iba cocio de narices... Poco a poco se fue yendo la gente a sus respectivas casas y quedaron para cerrar la noche Cano, Ricardo y Emilio. Al filo de las 4 de la madrugá los tres amigos se disponen a marchar hacia casa. Como siempre Cano tira Calle Coria arriba y Emilio y Ricardo dirección Colo. Es entonces cuando Emilio le dice a Ricardo: "Venga Dixi... te acompaño a casa de tu abuela..."

Tras esta decisión y de camino a casa de la abuela de Ricardo, Emilio se para a la puerta de cierta señorita de la cual estaba enamorado en aquellos momentos. Con to la diaria encima le dice a Ricardo entre balbuceos: "Voy a sentarme.... en ca'.... mi suegra...". Emilio entre tambaleo y tambaleo consigue aposentar su trasero en el umbral y, tras unos segundos sentado allí, se levanta a duras penas y con tono bohemio se le oye entonar cierta melodía que decía así: "Tan lejos, tan lejosssss.... tan lejos, tan lejos, pero tan cerrrddca... algún día pasará por aquí". Todo esto, Ricardo, móvil en mano grabando la escena, se descojonaba vivo.

Tras esta gran interpretación por parte de nuestro Neanderthal, se vuelve a sentar en el umbral. Unos pequeños instantes y Emilio queda dormido en la puerta. Ricardo graba un segundo video a lo que Emilio tras un minuto en babia se despierta y con una tostá que no puede con ella decide que lo mejor es irse ya para casa. Llegan a casa de la abuela de Ricardo y Emilio se despide su amigo y tira por el Magarzal parriba, dirección Prao Mercao. Ricardo espera unos instantes para ver como Emilio sube Magarzal parriba. Tras ver que no llevaba recorridos 10 metros y ya había cambiado dos veces de acera, decide, muy a su pesar con las horas que eran y el cacho que quedaba hasta la Isla, acompañar a Emilio y a su soberana balaguera.

Vamos dirección casa de Emilio y, a mitad del camino, Patato decide entrar a un corral que ya conocía. Ricardo lo intenta impedir pero era imposible, Emilio ya estaba dentro. Ricardo lo sigue para intentar sacarlo de ahí y mientras Emilio se movía en su hábitat natural sin prisa por llegar a casa. Se queda Emilio parado delante de un olivo rodeado de zarzas, aparentemente peligroso y Ricardo unos metros detrás de él, esperando sus reacciones. Todo serio, pregunta Emilio: "Ricardo, a qué no sabes que es lo que hay hay en esas zarzas" y Ricardo responde: "Pues Emilio, supongo que será algún pozo o alguna nora que habrá en el corral". Emilio to tajao responde sorprendido y más amuermao que nunca: "Ostia tio, cómo lo has sabio... que listo eres eh..." jajajaja. Tras este episodio Ricardo saca a Emilio del corral y se disponen a marchar a casa de Emilio.

Llegan por fin al parque de la Isla y Emilio, borracho como una cuba decide descansar un rato. Mientras tanto Ricardo aprovecha para mandar un sms. Termina de mandarlo y se encuentra a Emilio nuevamente dormido, realizando una serie de curiosas oscilaciones. Consigue despertarlo y Emilio, como un relámpago sale andando dirección San Antonio, es decir, de nuevo por donde habiamos venido, dejando su casa en la dirección contraria.

Ricardo sale inmediatamente detrás de él e intentadolo convencer de que iba en dirección errónea. Mientras tanto Emilio, con paso acelerado seguía palante cada vez más lejos de su casa y Ricardo detrás hasta que llega a su altura. Es entonces cuando Emilio le dice a Ricardo to furioso y con ánimos de soltar el brazo: "A ver déjame en paz que por aquí se va a mi casa y ya sé llegar sólo". Ricardo mientras decide que Emilio caiga de la burra él sólo. Emilio anda y anda y llega hasta San Antonio y es entonces cuando se le escucha decir: "Ostia es verdad, si esto es la ermita...". Y media vuelta.

Se reencuentra con Ricardo, que lo acompaña finalmente a casa. Emilio, en el pequeño trayecto, pidió perdon unas 38 veces a su amigo. Finalmente llegan a casa de Emilio, Ricardo lo entra en casa y es cuando Emilio, sorprendentemente da las gracias a Ricardo por acompañarlo a casa, eso sí, en un lenguaje bastante extraño... Allí quedó Emilio durmiedo la mona tras un viernes fatídico que será díficil olvidar para Ricardo... porque para Emilio pocos recuerdos dejó en su mente.


*Decid que los videos de la ronda de Emilio a la señorita, tras una semana de cachondeo por parte de los miembros y amigos de la peña, Emilio cogió el móvil de Ricardo sin que este se diera cuenta, preguntó el código del móvil a cierta persona que lo sabía y los borró para siempre, dejándonos sin recuerdos de lo que fue el mayor cachondeo de aquel verano de 2006.